La lengua tiene una conexión directa con el sistema digestivo, especialmente con el estómago, el intestino delgado y el grueso.

Muchas veces podemos observar si algo no va bien en nuestro cuerpo ya que la lengua es un buen reflejo al observar el color o densidad de la capa blanquecina que se crea encima.

Es un mapa de diagnóstico que se puede utilizar para encontrar desequilibrios y si vemos algo extraño que nos inquieta siempre consultar a un experto.

Limpieza bucal

Es importante mantener una buena higiene bucal y sobretodo no olvidarnos de la lengua ya que durante la noche nuestro sistema digestivo permanece despierto eliminando toxinas de nuestro cuerpo depositándolas sobre la superficie de nuestra lengua.

El momento esencial para esta limpieza es por la mañana incluso antes de beber agua.

Primero hacer un raspado de lengua con el limpiador lingual, lavarse los dientes y frotar con el cepillo de dientes un poco la lengua al final y repetir suavemente el raspado con el limpiador lingual a la vez que vamos enjuagando con agua la boca.

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La salud oral en general es muy importante. Dado que nuestra lengua desempeña un papel esencial en la digestión, cuanto mejor se cuide, más creamos condiciones para un agni (ayurveda) saludable. Agni es responsable de transformar los alimentos que ingerimos en sustancias útiles y, según Ayurveda, es la clave para llevar una vida larga y saludable.

Raspar la lengua evita que las toxinas se reabsorban en el cuerpo y refuerza las funciones inmunológicas en general. El raspado de la lengua a primera hora de la mañana es una forma de poner en marcha el proceso digestivo estimulando las papilas gustativas.

Dientes y encías saludables

La limpieza de la lengua es una práctica sencilla y debe realizarse incluso antes de lavarse los dientes. Muchos estudios muestran que esta práctica también reduce las bacterias en la boca que pueden comprometer la salud de las encías y los dientes. El raspado también ayuda con el mal aliento al cambiar la micro flora en la boca y minimiza la putrefacción, y se observa que el raspado de la lengua supera en gran medida el cepillado dental para lograr esto.

Eliminar las toxinas para mejorar el sabor

Casi la mitad de nuestras bacterias orales viven en las papilas de nuestra lengua. El raspado de limpiador lingual recoge estos recubrimientos tóxicos de la lengua (que pueden variar en color entre transparente, blanco, amarillo o verde) y los elimina del cuerpo. Si esta saburra no se elimina, las papilas gustativas pueden bloquearse, lo que provoca falso deseo de comer y la incapacidad de reconocer los seis sabores, lo que afecta la digestión.

Fuentes: ayurvedahealth-shop.com


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